miércoles, 16 de marzo de 2011

El Tiovivo

     Tras la insistencia del profesor de psicología, que casualmente es el mismo que el de filosofía, en que se publicara una entrada de carácter psicológico, he decidido hacerla sobre una frase que oí hace unos días y que me impacto bastante.


     La frase dice así: " "No se llegará a comprender la naturaleza humana hasta que se sepa porque un niño montado en un tiovivo saluda a sus padres en cada vuelta y porque sus padres le devuelven siempre el saludo."  La dijo William D. Tammeus, que fue un periodista y columnista de la página editorial de The Kansas City Star que se retiró en 2006. He buscado información sobre la frase, pero no la he encontrado, así que lo que ponga en las siguientes líneas me lo tendré que sacar de la manga.


     La frase en sí pude parecer desconcertante, y lo es, o por lo menos a mi me lo parece. A mi entender se entremezclas varias cosas, la naturaleza humana, más concretamente la naturaleza infantil, junto con el amor padre-hijo y viceversa. Un niño pequeño ES, un niño pequeño no se preocupa del mañana y no piensa en el ayer, lo que le permite tener una mente libre que le permite reír,jugar,imaginar,inventar,fantasear... in en definitiva SER. Un niño al nacer es un folio en blanco, no tiene recuerdo, experiencias, traumas, vivencias... y en definitiva no tiene factores que le condicionen su manera de ser,  es al crecer cuando su cerebro se llena de ideas que le condicionan su manera de ser y de actuar.  


     El niño está montado en el tiovivo, y se supone que es el hecho de estar montado en él lo que le produce la diversión o la satisfacción, y que no depende de ningún factor más que no sea el mismo tiovivo, pero no es así, seguro que si el niño estuviera montado en un tiovivo en una habitación cerrada, o simplemente en un espacio abierto pero sin nadie a su alrededor, no sería la misma satisfacción ni le produciría ningún tipo de diversión. El niño siente la necesidad de mostrar a sus padres el situación satisfactoria que esta viviendo y es eso le que le produce la verdadera satisfacción. ¿Qué conclusión podemos sacar de aquí? Yo personalmente pienso que es que el ser humano no hace nada por sí mismo, sino que necesita de la "contemplación" de los demás, para que esa situación que de por sí debería ser positiva, lo sea realmente, por ejemplo, si a una persona le toca la lotería lo primero que hace es contárselo a sus seres queridos. ¿Por qué? Si la satisfacción y la alegría esta en el hecho de que te haya tocado la lotería, qué necesidad hay en contárselo a los demás, yo no creo que sea "recochineo" o el placer de mostrarse superior a los demás, yo creo que es algo más . Pero no se, igual la frase va por otro sito que yo no he encontrado, por eso agradecería otras interpretaciones.


Bueno, pues a grandes rasgos está es mi interpretación de la frase psicológica que he elegido, espero comentarios y que haya sido de su agrado.